CALENDARIO AGRÍCOLA: Enero y febrero

Enero

 ¿QUÉ SE HACÍA?
La fiesta principal de Enero eran los Reyes.
Antiguamente cenábamos pronto y nos acostábamos en seguida porque si no los Reyes no podían venir y claro estábamos pendientes a ver si venían y los sentíamos, pero no sentíamos nada. Teníamos que poner el zapato o la zapatilla a la ventana de nuestra casa y ¿que nos podían echar? Como no había nada, nos dejaban unas nueces, cuatro almendras, unos caramelos, a lo mejor una onza de chocolate, alguna mandarina ¡y es lo que había! Los pobres abuelos no tenían nada y tan contentos con lo que nos dejaban.
Al despertar por la mañana era un desbarajuste. Íbamos a ver si alguno tenía más, pero todos teníamos más o menos. Nos medían por la misma medida. Después ¡ a comernos las almendras, las nueces y el chocolate y eso es lo que había y tan contentos! Nos íbamos a otro sitio y nos habían echado poco más o menos lo mismo.

REFRANES
-En Enero de día al sol, y de tarde al brasero.
-Enero helado, Febrero trasnochado.
-Enero y Febrero hinchan en granero.
-Enero y Febrero meses barbecheros.
-Por Enero florece el romero.
-Por los Reyes, los días y el frío crecen.
-El sol de Enero, poco duradero.
-En Enero, enciende la abuela el brasero.
-Lluvias de Enero, llenan cubos, tinaja y granero.
-Por los Reyes, lo conocen los bueyes, y por San Damián el gañán.
-Por San Antón, gallinita pon.
Los marrranos de Enero, con su madre al matadero.

fEBRERO

¿QUÉ SE HACÍA?
En este mes se hacía poco porque el tiempo no favorecía. Se echaba de comer al ganado que estaba en los establos y como hacía malo, no lo podían sacar.
A últimos de mes se hacían regaderas para luego, en Abril, poder segar y limpiar los prados. También se preparaban las astillas que era lo que había para la lumbre y … ¡venían los Carnavales!

Llegan los Carnavales, días de mucha fiesta . Se empezaba desde “San Antón carrestolillas son”. Desde entonces ya se salía a pedir a todos los forasteros que venían a vender. En cuanto se corrían los voces, salíamos todas corriendo, pero algunos tenían malas pulgas para soltar algo de lo que traían a vender: unos aceitunas, otros fruta, otros galletas. La cosa es que dieran algo.
Después, el lunes y martes de carnaval se iba a «soltar los gañanes», que estaban arando o haciendo regaderas y se tenían que venir a casa. Y el miércoles de ceniza se enterraba la sardina. Todas las mozas iban de luto, y el vestido del cura también era negro. Luego con lo que se había sacado se comía y se hacía chocolate y se ponía el baile con tapaderas.
En los hornos del pueblo se hacían los mantecados de manteca de aceite. Se sacaban las ropas de las abuelas: los mantones , los manteos, los pañuelos de ramo, ¡ y a bailar !. Cuando no era baile con música se hacía baile con tapaderas y botellas labradas que se las sacaba brillo para tal fin. Eran días muy divertidos.

REFRANES       REFRANES      REFRANES
-En Febrero busca la sombra el perro, a últimos no a primeros.
-Febrero loco, ningún día se parece a otro.
-En Febrero mete tu obrero, tu pan te comerá, pero tu laborcica te hará.
-Mal año espero, si en Febrero anda en mangas de camisa el jornalero.
-Por San Blas, tus ajos sembrarás.
-Por San Blas, la cigüeña verás, y si no la vieres año de nieves.
-Por San Matías, tanta noche como día.
-Cuando la Candelaria plora, el invierno flora.
-Si no lloviera en Febrero, ni buen prado ni buen centeno.
-Febrerillo loco, con dos días veintiocho, sacó a su padre al sol, y después lo apedreó.

TRADICIONES POPULARES:La luminaria

La luminaria es una tradición que se celebra en La Torre el 18 de Marzo al anochecer. En Muñana. se celebra el sábado más próximo al 19 de marzo.

Consiste en  hacer una gran hoguera a las afueras del pueblo.

Cuando se empiezan a podar los árboles y los arbustos, se van amontonando las ramas en el lugar donde luego se hará la luminaria. Además se trae leña del monte.


Antes los mozos iban al monte y cortaban leña gorda y leña fina. La leña fina la quemaban y la gorda la subastaban. Con el dinero que sacaban de la subasta hacían una cena después de la luminaria y también les tocaba algo a los mozos. Mientras los mozos en el monte cortaban leña, las mozas hacían un cordero a las brasas.

Cada vecino traía una brazada de leña, cada uno lo que podía.

Los mozos iban a los solares, cogían maderos y se salían corriendo para que no los pillaran.

Mientras la gente contemplaba  cómo se quemaban los palos, los mozos se iban pasando una bota de vino alrededor de la hoguera y cuando la bota se terminaba la volvían a rellenar.

Los mozos atrevidos saltaban la hoguera. Al final los mozos y las mozas cenaban juntos, contaban chistes, hacían bromas y se lo pasaban muy bien.

Una tradición era que cuando la lumbre se estaba apagando, la gente cogiera un tizón  a medias de apagarse para  echarlo a su tejado porque decían  que los protegían de los rayos y que daban buena suerte.

También hacían unos muñecos llamados “pericos” que se hacían con ropa vieja y se rellenaban con paja.

Los pericos los hacían el martes de Carnaval las personas que querían. Por las noches se ponían a las puertas o en los balcones de las casas, para que por las mañanas los dueños de la casa se asustaran.

El día 18 se quemaban junto con la leña.

Actualmente, la luminaria se sigue celebrando.

 

 

Todo el pueblo se reúne alrededor del fuego, contemplando cómo se quema lo viejo, hablando y recordando “viejos tiempos”.

Alumnos y alumnas
de La Torre (hace unos años)